30º Juegos Deportivos Escolares Virtuales “Indeportes Antioquia 2020”– Zonales Suroeste y Norte y Bajo Cauca
30/10/2020La Voz del Deporte Antioqueño de Indeportes Antioquia, del sábado 31 de octubre de 2020, por la Emisora Cultural U. de A.
31/10/2020Hoy presentamos la vigésima octava entrega de esta serie, correspondiente a la segunda parte del décimo cuarto capítulo del libro Indeportes Antioquia 50 años.
En esta edición, les seguiremos hablando de la manera cómo la medicina deportiva empezó a influenciar los procesos deportivos en el departamento de Antioquia y en Colombia.
La fuerza paisa con el conocimiento alemán
Una de esas alianzas estratégicas con Alemania fue el convenio para desarrollar la medicina deportiva en Colombia, especialidad muy poco conocida en nuestro país. El convenio se configuró a través de la Agencia para la Cooperación Internacional, GIZ, y se firmó directamente entre el gobierno alemán y Coldeportes Nacional, entidad que en 1974, año de inicio del convenio, era dirigida por Enrique Lara.
“Coldeportes distribuyó el convenio entre Antioquia y el Valle. Valle debía iniciar un programa de Educación Física en la Universidad del Valle y a Antioquia le correspondió la parte de documentación e información del deporte; investigación y adecuación del currículum en Educación Física y Medicina Deportiva”, cuenta Álvaro Ortiz, médico líder del proyecto en Antioquia durante esos años.
Aunque oficialmente el convenio se firmó en 1974, la verdad es que solo empezó a funcionar debidamente a partir de 1976. Alemania debía enviar un médico esporádicamente para que desarrollara el concepto acordado, Ulpiano Echeverri y Orlando Maya son la contraparte colombiana. Maya era médico ortopedista formado en Alemania y exjugador de fútbol de Atlético Nacional.
Pero el convenio empezó mal porque el médico alemán, Bernard Schmückle, el primero en ser enviado, renunció a los seis meses y regresó a su país debido a un contrato con una importante universidad. Ulpiano Echeverri y Orlando Maya se quedaron solos y la alianza se vino abajo.
Entre 1974 y 1975 el dirigente Diego Palacios invitó al médico Álvaro Ortiz a trabajar con Coldeportes Antioquia. Eran amigos de muchos años y habían jugado en la Selección Antioquia de Voleibol. Palacios era el jefe de la división técnica de Coldeportes Antioquia en la administración de Jorge Pinzón.
Álvaro Ortiz se estaba especializando en pediatría y rechazó la oferta. El elegido fue Alfonso “Pipe” Mejía, quien fue el primer médico a cargo de la medicina deportiva en Coldeportes Antioquia, aunque tampoco logró avances significativos con el convenio.
“En 1976 me aburrí de la pediatría y le pregunté a Palacios si todavía estaba disponible el puesto, me dijo que sí y entonces nos fuimos juntos a hablar con Pinzón, quien de inmediato me aceptó para el cargo. Así fue como entré a Coldeportes Antioquia”, cuenta Ortiz.
En ese momento, Colombia tenía un convenio con Cuba de cara a los Juegos Centroamericanos y del Caribe de 1982. Representantes del gobierno cubano visitaban con frecuencia a nuestro país para estrechar lazos e intercambiar conocimientos. A través de ese convenio se buscó formar y capacitar a entrenadores de todas las disciplinas, a quienes además se les brindaban pasantías en Cuba de tres y cuatro semanas.
En una de esas visitas de los cubanos se incluyó la medicina deportiva. Álvaro Ortiz viajó a Cuba durante diez días. “Allá entendí lo complejo que era la medicina deportiva. Conocí de fisiología, de metodología, de traumatología, de la planeación del entrenamiento, de psicología aplicada al deporte, de fisioterapia, de todo ese mundo interdisciplinario. También la evaluación, el seguimiento y los análisis estadísticos. Los cubanos habían acabado de hacer un mundial de boxeo, y tenían un montón de estadísticas e informes técnicos de ese evento. Me traje una idea muy amplia de lo que era la medicina deportiva, y por eso cuando volví comencé a desarrollar un proyecto de medicina deportiva, pero no como algo al servicio del deportista, sino como algo más complejo, y entonces revivimos el convenio con Alemania, con la República Federal Alemana, pues eran los tiempos del Muro de Berlín”, añade el médico antioqueño.
En Antioquia, así se dieron los primeros pasos en medicina deportiva
“La historia de la medicina deportiva en Antioquia comienza con el convenio colombo-alemán. Le debemos mucho a esa alianza. El primer médico a cargo de la medicina deportiva en Coldeportes Antioquia fue Alfonso “Pipe” Mejía”, relata Felipe Marino, médico de Indeportes Antioquia.
Cuando Mejía llegó, lo único que había del convenio eran las máquinas: un espirómetro y tres ergómetros. Mejía, junto al doctor Orlando Maya, hicieron los primeros exámenes a deportistas con los avanzados aparatos alemanes. La atleta Gloria Sánchez y el pistero Balbino Jaramillo fueron los primeros en probar las máquinas.
Cuando Álvaro Ortiz regresó de su pasantía en Cuba, se dio a la tarea de reactivar los equipos. “Lo primero que se trajo fue un equipo de fisiología para hacer espirometría: análisis del consumo de gas y de oxígeno durante la actividad física. También trajimos los tres cicloergómetros, que eran una especie de bicicletas suecas. De igual forma, contratamos al médico Friedmund Riettel, quien nos ayudó a entender las máquinas, a actualizarlas y a sacarles mejor provecho”, cuenta Ortiz.
“De esos primeros años del convenio también se produjeron varios libros, uno se llamó ‘Sistema cardiovascular y deporte’, el otro ‘Sistema muscular y deporte’, otro se nombró ‘Ergoespirometría’ y también se sacó otro de psicología deportiva”, añade el ya retirado médico Alfonso Mejía.
Audio de este texto AQUÍ – Texto en formato .pdf AQUÍ
Realización: Oficina de Comunicaciones de Indeportes Antioquia.
Autor del texto original: comunicadora social Ana Cristina Marino Mondragón
Adaptación de textos para radio: Juan B. Estrada Mosquera.
Año: 2020 @copyright.